Que 350 usuarios visiten tu web cada hora no sirve de nada si la experiencia del usuario de tu web hace que tengas una tasa de rebote del 80%.
En este artículo entenderás la relación que existe entre la experiencia del usuario y las conversiones de tu negocio online.
¿Qué es la UX o experiencia del usuario?
La experiencia del usuario mide la facilidad de uso de las interfaces web que existen en Internet.
La velocidad de carga, la accesibilidad, la usabilidad y la adaptabilidad, forman parte de las mejoras que se deberán tener en cuenta para mejorar la forma de acceder e interactuar con el contenido que tienen los usuarios que visitan un sitio web.
¿Qué elementos se deben verificar para tener una buena UX?
Hay métricas que ayudan directamente a controlar que una web ofrezca una buena experiencia del usuario. ¿Cuáles?
- Páginas de entrada y tasa de rebote.
Tener estos dos datos nos ayudará a entender la diferencia entre visitas con rebote y visitas reales.
- CTR.
Para contabilizar el número de clics respecto a sus impresiones, teniendo el tanto por ciento de clics en un enlace.
- Tasa de conversión.
Con este dato se conoce el tanto por ciento de visitas que acaban en compra o acción del usuario.
- Tiempo de carga.
A la mayoría de usuarios de Internet no nos gusta esperar. Por eso tener un tiempo de carga elevado hará que tu web pierda visitas.
5 consejos para tener una buena experiencia del usuario
- Estructura y navegación coherentes.
Como ya he comentado antes, el usuario de Internet no quiere perder el tiempo pensando o averiguando como navegar por una web. Por eso la estructura de tu web deberá ser coherente y deberá hacerle el camino fácil y rápido a sus visitantes.
El usuario debe saber donde se encuentra en todo momento y hacia donde debe ir para conseguir la información que busca o realizar la acción que quiere hacer.
De ahí nace la enorme importancia que tiene la página principal y los menús de navegación visibles para servir de guía por el resto de las páginas del sitio web.
- Diseño eficiente.
El visitante de tu sitio web no deberá necesitar un aprendizaje previo para navegar en ella. Para conseguir que el diseño sea coherente, atractivo y a la vez eficiente, deberá ser una mezcla perfecta de estética, singularidad y diseño fácil e intuitivo.
No te pases con la originalidad y tienda más a hacer aquello que ya le funciona a la competencia, añadiendo, claro está, tu punto diferenciador.
- Legibilidad.
Una de las claves para mejorar la experiencia del usuario y el SEO de tu sitio web, deberás adaptar las secciones de texto e imagen de forma que se entienda sin problema por cualquier usuario.
Piensa que el usuario de Internet no lee, escanea. Por tanto, jugar con resaltadores, diferentes tipografías, tamaños, colores y formatos hará que el texto más importante cobre relevancia y así poder transmitir más claramente las ideas principales al usuario.
- Tiempo de carga.
La capacidad media de atención va disminuyendo con los años. Cada vez estamos más acostumbrados al contenido rápido, efímero y veloz.
Por eso, este se convierte en un elemento fundamental a tener en cuenta a la hora de crear una página web.
¿Cómo puedes mejorar el tiempo de carga de tu web y mejorar así la experiencia del usuario?
Optimiza las imágenes, iconos e ilustraciones que publiques en tu web antes de publicarlas y asegúrate de que no existen enlaces rotos que dificulten la carga de la página.
- Diseño responsive.
No es algo nuevo cuando hablamos de la gran cantidad de usuarios que consultan los sitios web desde sus dispositivos móviles. ¿No crees?
Pues por ese motivo deberás adaptar todos los puntos anteriores a los distintos dispositivos y a cualquier plataforma y navegador.
Se pueden perder muchas visitas por hacer una mala adaptación del contenido.
¿Te gustaría saber cuál es la experiencia del usuario de tu web? Pide una auditoría personalizada para mejorar el SEO y el UX de tu web.